Por Ruperto de la Caridad Perez
En horas de la noche del día de ayer (24 de Diciembre de 2010) se firmó
en la Habana en conmemoración al Día de la Declaración Universal de
los Derechos Humanos, el Primer Convenio
Socio-Cultural-Político-Ideológico de una serie de tres, entre los
pueblos hermanos de México y Cuba.
A partir de Enero del 2011 como primer paso de este convenio comenzará a funcionar la misión:
Amiguitos del Golfo de México. Una misión basada en un profundo
sentimiento de internacionalismo proletario y humanitario.
Este ambicioso proyecto pretende hacer un intercambio de 11 millones
de hermanos mexicanos que arribarán a Cuba por las vías aérea y marítima. Luego,
11 millones de cubanos volarán a Ciudad México (la vía marítima en este caso está en
análisis aún, según reportaron fuentes oficiales).
La finalidad del proyecto consiste en hacer llegar a estos cubanos a la fontera mexicano-estadounidense y luego podrían optar, de forma voluntaria, a incorporarse al territorio de los Estados Unidos de América y acogerse a la Ley de Ajuste Cubano.
Por otra parte, los 11 millones de mexicanos optaran por convertirse en ciudadanos cubanos en un acelerado proceso que brindará la Embajada de México en La Habana, en colaboración con el Ministerio del
Interior (MININT), específicamente la sección de Inmigración y Extranjería.
Luego de obtener la nacionalidad cubana, los nuevos ciudadanos mexicano-cubanos podrían optar por lanzarse a la mar; pero siempre con rumbo Norte, e ingresar a tierras estadounidenses (de Norteamérica; pues si se desvían con rumbo oeste serían tierras estadounidenses de México, aunque no tendrían ningún problema legal, ya que mantendrán su ciudadanía mexicana, un privilegio brindado de forma gratuita por el
gobierno de La Habana).
Con este convenio se intentará dar fin de forma generosa a unos de los conflictos migratorios más grandes y dolorosos de la era contemporánea. Se evitaría así la muerte de inmigrantes mexicanos ilegales tratando de cruzar el Río Bravo o en su penosa marcha a través de la desértica zona del suroeste estadounidense de
Norteamérica o su deportación luego de arribar a su destino. Se evitaría además la muerte y detención en alta mar de balseros cubanos y la detención, secuestro, extorsión y deportación de la que son víctimas
otros cubanos que arriban a México intentando llegar a Estados Unidos...
(Continuará en la próxima edición.)
El bodeguero de la calle Ocho
Hace 2 semanas