marzo de 2010
Cuba se des-arma. Y se des-alma. Fuentes allegadas a los altos mandos
de la jerarquía militar, confirmaron en esta capital, la decisión del
gobierno cubano sobre la reducción paulatina de unidades de combate
en las tres divisiones con que cuenta el país, a saber: Occidente,
Centro y Oriente. Las tropas así desmovilizadas se incorporarán a
labores agrícolas o de la construcción. Problemas de plantilla, por
supuesto. La Defensa Civil y las llamadas unidades de reserva en
tiempo de paz, permanecerán sin ser tocadas en su nomenclatura, por
el momento. Como se sabe, mantener a la nación en pie de guerra -ya
va para cincuenta años- es un lujo que no puede mantenerse en las
actuales coyunturas económicas. Aunque siempre es Liborio el que
paga: "¡el presupuesto no da para más, compay!", le dicen...